Escribo desde París y la fiesta me he montado yo en la habitación, chateando con alguno de vosotros mientras devoro un Toblerone (mítico del mini bar) y un paquete de galletas. Me gusta estar a solas en hoteles en los que sólo me cruzo con hombres de traje gris. Siento que la historia no va conmigo y recuerdo la Barbie 'día y noche' que tenía cuando era pequeña: En su versión de día, con un traje de chaqueta rosa y blanco y maletín de ejecutivo. En la habitación, husmeo el minibar, 'zapeo' por canales en los que no me detengo, y acabo llamando al servicio de habitaciones, pues siempre hay algo con lo que no me aclaro.
He estado cenando frente a la Torre Eiffel. Ha perdido su toque romántico con tanta luz y una pantalla de leds que marcaba el resultado de un partido de rugby.
Os dejo una canción que Sanders compartía conmigo este fin de semana. Between the bars, de Elliot Smith
drink up, baby, look at the stars
I'll kiss you again between the bars where I'm seeing you
there with your hands in the air, waiting to finally be caught
drink up one more time and I'll make you mine
keep you apart deep in my heart separate from the rest
where I like you the best and keep the things you forgot
lunes, 1 de octubre de 2007
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2 comentarios:
pues paselo usted muy bien en la France....gran cancion...grande elliot! tambien soy su suscriptor!
un besin!
PD si es una historia real...
¿Cuándo vuelves de París?
bsín
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